Sábado 11 de marzo
I de cuaresma
(Recuerda:
1. Pide el Espíritu Santo
2. Lee despacio y entiende
3. Medita qué te dice la Palabra de Dios
4. Ora, respóndele al Señor)
Evangelio según san Mateo 5, 43-48
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Habéis oído que se dijo: «Amarás a tu prójimo» y aborrecerás a tu enemigo.
Yo, en cambio, os digo: Amad a vuestros enemigos, y rezad por los que os persiguen. Así seréis hijos de vuestro Padre que está en el cielo, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y manda la lluvia a justos e injustos.
Porque, si amáis a los que os aman, ¿qué premio tendréis? ¿No hacen lo mismo también los publicanos? Y si saludáis sólo a vuestros hermanos, ¿qué hacéis de extraordinario? ¿No hacen lo mismo también los gentiles? Por tanto, sed perfectos, como vuestro Padre celestial es perfecto.»
Pistas: Hace poco tiempo que leíamos este Evangelio, pero hoy se nos presenta una buena oportunidad para descubrir que la Palabra de Dios siempre nos dice cosas nuevas. Cuando releas el Evangelio, hazlo despacio, pensando en las implicaciones que tiene para tu vida.
Respecto a las situaciones concretas que estás viviendo: ¿Cómo amas? ¿a quién amas? Jesús dice que hay que amar a los enemigos y orar por los que te persiguen. ¿Tienes enemigos? ¿hay gente que quiere hacerte daño o que te desprecian o no te valoran? ¿alguien quiere destruir tu trabajo? ¿recibes criticas por tus creencias? ¿te sientes perseguido? Pon nombres y caras a lo que estás leyendo. Y piensa qué te dice Jesús.
Ama porque Dios te ama a ti, que eres pecador, que muchas veces haces las cosas mal. Dios es amor y te invita a vivir en la perfección de su amor. ¿Quieres una vida extraordinaria? Confíale lo que eres y pídele que te llene de su amor.
Con estas pistas, ahora relee el Evangelio y ora con la Palabra que Dios te dirige hoy.