Viernes 06 de octubre
San Bruno, presbítero
(Recuerda:
1. Pide el Espíritu Santo
2. Lee despacio y entiende
3. Medita qué te dice la Palabra de Dios
4. Ora, respóndele al Señor
Evangelio según San Lucas 10, 13-16
En aquel tiempo, dijo Jesús: ¡Ay de ti Corozaín, ay de ti, Betsaida! Si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros que en vosotras, hace tiempo que se habrían convertido, vestidos de sayal y sentados en la ceniza. Por eso el juicio les será más llevadero a Tiro y a Sidón que a vosotras. Y tú, Cafarnaún, ¿piensas escalar el cielo? Bajarás al abismo.
Quien a vosotros os escucha, a mí me escucha; quien a vosotros os rechaza, a mí me rechaza; y quien me rechaza a mí, rechaza al que me ha enviado.
Pistas: Tiro y Sidón son ciudades portuarias puestas como modelo de paganismo. Jesús quiere constatar la dureza de corazón de aquellos que le rechazan.
De esta primera parte podemos pensar que nosotros somos aquellos a los que Jesús ha tratado como a privilegiados. Si otros hubieran oído hablar de Dios tanto como tú y como yo, si tuvieran las oportunidades que nosotros tenemos de conocer a Jesús… O tal vez pienses que ya no necesitas más, que lo sabes todo de Jesús y puedes “escalar al cielo”. El Evangelio de hoy es una invitación a acoger a Jesús sabiendo verle en el día a día, y para ello hace falta ser humilde.
En la última parte Jesús enseña que la actitud ante los discípulos enviados por Él a anunciar el Evangelio implica aceptarle o rechazarle a Él mismo. Por eso una fe sin Iglesia, sin que nadie venga en nombre de Jesús, es imposible. Y, por otra parte, si Jesús te envía tienes garantizada su fidelidad y podrás ser un medio para que otros le escuchen y acojan.
Si estás en algún ministerio en la Iglesia, si ayudas a otros a conocer a Jesús, si compartes tu fe, no dudes de que Jesús va contigo.
Relee el Evangelio, escucha lo