Miércoles 3 de enero
Santísimo Nombre de Jesús
(Recuerda:
1. Pide el Espíritu Santo
2. Lee despacio y entiende
3. Medita qué te dice la Palabra de Dios
4. Ora, respóndele al Señor)
Evangelio según san Juan 1, 29-34
Al día siguiente, al ver Juan a Jesús que venía hacia él, exclamó: «Éste es el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo. Éste es aquel de quien yo dije: "Tras de mí viene un hombre que está por delante de mí, porque existía antes que yo." Yo no lo conocía, pero he salido a bautizar con agua, para que sea manifestado a Israel.»
Y Juan dio testimonio diciendo: «He contemplado al Espíritu que bajaba del cielo como una paloma, y se posó sobre él.
Yo no lo conocía, pero el que me envió a bautizar con agua me dijo: "Aquél sobre quien veas bajar el Espíritu y posarse sobre él, ése es el que ha de bautizar con Espíritu Santo."
Y yo lo he visto, y he dado testimonio de que éste es el Hijo de Dios.»
Pistas: ¿Quién es Jesús? Es el que quita el pecado del mundo, en Él hay salvación. Jesús vencerá al pecado, al mal y a la muerte. Como nos recuerdan estos días, nada volverá a ser igual después de Él. Es el que existe desde antes (como explica Juan en el capítulo 1 de su Evangelio. Es la Palabra que existe desde siempre y que en Jesús se encarna, se hace hombre –lo leíamos el día de Navidad-). Es el Mesías que el Antiguo Testamento anunció y Juan el Bautista señala. Es el que está lleno de Espíritu Santo y bautizará con Espíritu Santo. Es el Hijo de Dios.
Hoy celebramos la fiesta del Santísimo Nombre de Jesús. Es el nombre que le pusieron, como le había dicho el ángel a María, porque salvará al pueblo de sus pecados. Y Jesús dice que en su nombre hay poder, que lo que pidamos en su nombre Dios nos lo dará.
Es Navidad, tiempo de acercarse a Jesús. ¿Quién es Jesús? En su nombre hay poder. Acércate a Él y adórale, alábale, pídele… En Él hay salvación.
Una canción que puede ayudarte a rezar: https://www.youtube.com/watch?v=nQWFzMvCfLE y en español https://www.youtube.com/watch?v=ZoKsBeoEW18
Relee el Evangelio, escucha lo que Dios te dice y respóndele con tu oración.