Lunes 13 de marzo
II semana de cuaresma
(Recuerda:
1. Pide el Espíritu Santo
2. Lee despacio y entiende
3. Medita qué te dice la Palabra de Dios
4. Ora, respóndele al Señor)
Evangelio según san Lucas 6, 36-38
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Sed compasivos como vuestro Padre es compasivo; no juzguéis, y no seréis juzgados; no condenéis, y no seréis condenados; perdonad, y seréis perdonados; dad, y se os dará: os verterán una medida generosa, colmada, remecida, rebosante. La medida que uséis, la usarán con vosotros.»
Pistas: Cada frase de este Evangelio habla por sí misma. Todo el mensaje de hoy gira en torno a dos ideas. Por un lado, cómo es el Padre y cómo se comporta con nosotros. Por otro, tratar al prójimo como queremos que nos traten a nosotros. Por un lado, cómo es el amor de Dios. Por otro, cómo es el nuestro.
Por eso, como Dios es compasivo contigo, tú tienes que serlo con los demás. Cómo tú quieres que no te juzguen ni te condenen, quieres que te perdonen cuando te equivocas, que sean generosos contigo, tienes que ser así con los demás.
Jesús, como siempre, va más allá y nos invita a usar una medida “generosa, colmada, remecida, rebosante”, a superar la medida. Como hace Dios con nosotros, como Jesús en su entrega y su amor, como el Espíritu Santo llenando nuestra vida.
Porque Dios ama sin medida, incondicionalmente. Y te invita a arrancar de tu vida el pecado y a entrar en su rebosante amor.
Relee el Evangelio, escucha lo que Dios te dice y respóndele con tu oración.